El lifting de brazos, también conocido como braquioplastia, es una técnica quirúrgica especializada, diseñada para mejorar el aspecto de los brazos que han desarrollado flacidez debido al envejecimiento natural, cambios significativos de peso o pérdida de elasticidad de la piel.
La braquioplastia tiene como objetivo principal eliminar el exceso de piel y grasa de los brazos, proporcionando así unos brazos más estilizados, firmes y tersos. Esta intervención es ideal para pacientes que se sienten incómodos con el aspecto de sus brazos debido a la flacidez y el descolgamiento de la piel.
El procedimiento se realiza con anestesia general o sedación y anestesia local en clínica y el paciente es dado de alta a las 12 o 24 h.
Se recomienda reposo de entre 2 a 4 semanas dependiendo cada caso. Y el uso de faja comprensiva por un mes.